Si eres amante de las pastas, y te gustan los canelones tradicionales, puedes aprender a hacer una versión diferente que no te implicará más trabajo, ¡y que te resultará deliciosa!
Esta receta que podrás aprender aquí es una alternativa al “rótolo”, una comida originaria del norte de Italia que consiste en un un rollo de masa relleno que se enrolla y se sirve en rodajas.
Esta versión es más fácil de hacer que la tradicional, no necesitarás muchos ingredientes y tendrás en poco tiempo una comida irresistible.
¿Qué estás esperando para probarla? ¡Anímate!
Ingredientes
Para 4 porciones:
- 8 láminas de pasta para lasaña que puedes adquirir en mercados fácilmente
- ½ taza de queso mozzarella rallado
- Queso parmesano rallado para servir (opcional)
Para el relleno:
- 250 gramos de espinacas
- 500 gramos de queso ricotta
- 1 huevo
- ⅓ taza de queso parmesano rallado
- 1 diente de ajo picado
- Una cucharadita de nuez moscada en polvo
- ½ cucharadita de sal
- Pimienta negra
Para la salsa de tomate:
- 700 gramos de puré de tomate
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo picados
- Un puñado de hojas de albahaca (opcional)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de azúcar
- ½ cucharadita de sal
- Pimienta negra
Preparación
1. Comienza preparando la salsa de tomate. Para eso, pon en una sartén un poco de aceite de oliva, añade el ajo y cocina durante diez segundos. Luego, pon la cebolla y cocínala hasta que esté transparente. Por último, agrega el resto de los ingredientes de la salsa y cocina revolviendo durante dos minutos.
Nota: separa una taza de salsa para esparcir por encima del plato una vez que lo termines.
2. Sigue ahora preparando el relleno. Cocina las espinacas en agua hirviendo por unos minutos. Luego, escúrrelas bien y pícalas fino (también puedes procesarlas). En un recipiente, mézclalas junto con el resto de los ingredientes del relleno.
3. Arma rollitos con las láminas de lasaña formando los canelones. Aplica un poco de agua para sellarlo.
4. Corta los rollos en tres piezas más pequeñas.
5. Coloca salsa de tomate en una fuente de horno y pon los rollitos por encima, cubriendo toda la fuente. Rocía con la salsa de tomate que reservaste y cocina durante media hora.
6. Retira del horno, coloca el queso mozzarella por encima y cocina por diez minutos más hasta que se haya derretido.
¡Que lo disfrutes!
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